Posiblemente necesite
- Destornilladores
- Aguja de tejer
- Pasador
- Trapo
- Cinta doble faz
- Cinta de enmascarar
Antes de quitar la tapa de la puerta, el levantavidrios y la manija interior deben ser retirados. Tambíen tendrá que sacar el pulsador del brazo de bloqueo y un apoyabrazos (en caso de haber).
Se utiliza una gran variedad de métodos para fijar los accesorios, incluidas las abrazaderas de tornillos, tacos de presión y lengüetas.
Extracción de un levantavidrios
Hay tres formas habituales de asegurar el levantavidrios. La más sencilla es con un tornillo central, a menudo oculto por la tapa.
Si no hay ningún tornillo, presione la tapa hacia la puerta y mire detrás del levantavidrios a su eje.
Gire el levantavidrios y observe si hay un pasador de fijación o un gancho de metal doblado sosteniendo el eje.
Con la tapa todavía presionado hacia atrás, quite el pasador o deslice hacia atrás el gancho. Fuerce la salida de un pasador con una herramienta fina tal como una aguja de tejer.
Para desabrochar un gancho de metal, utilice un destornillador para soltarlo de su ranura o engánchelo de nuevo con un pasador doblado.
Extracción de la manija de la puerta y un pulsador de bloqueo
Las manijas interiores de las puertas empotradas muchas veces se sostienen por medio de tornillos avellanados. Quite los tornillos, gire el ensamblaje de la puerta y suéltela de la varilla de control.
Si no hay tornillos, la manija normalmente se mantiene en posición gracias al marco exterior de plástico. A veces es presionado hacia la tapa y se puede levantar con un destornillador.
Alternativamente, se puede ajustar deslizándolo sobre las lengüetas, y remover deslizando un destornillador y levantándolo.
Si falla la palanca al mover el marco, vea cómo se monta en el manual de servicio o consulte con su distribuidor local.
Si un pulsador de bloqueo tiene que ser removido, la mayoría de las veces se puede desenroscar desde su varilla de control.
Extracción del apoyabrazo
La mayoría de los apoyabrazos se mantienen en posición con grandes tornillos autorroscantes. Estos se aprietan en los sujetadores de nylon fijados en el marco de la puerta.
Por debajo de los apoyabrazos encontrará las cabezas de los tornillos. A menudo se ocultan bajo una solapa de plástico. Si no hay tornillos, el apoyabrazo probablemente se desprenderá con el panel.
Cómo deshacer las fijaciones de la tapa
La forma más común de fijación de la tapa en una puerta es con tacos de plástico a presión en el panel. Estos se conectan a los agujeros de fijación del marco de la puerta. Otra opción es el uso de ganchos metálicos.
Proteja la pintura con un paño doblado e inserte un destornillador de punta ancha por debajo del panel en la esquina trasera inferior. Hágale palanca hasta que pueda ver el taco más cercano.
Inserte el destornillador al lado del taco y gírelo suavemente para sacarlo. Repita el procedimiento con cada taco.
En algunos autos el borde superior de la tapa se encaja en un canal y por lo general se puede sacar una vez que se han removido los tacos de presión.
Si no lo puede sacar es posible que el borde superior esté sostenido con lengüetas, las cuales se encajan en las ranuras de los marcos. Mueva con cuidado el panel hasta que se suelte de las lengüetas.
Las láminas de plástico se pegarán al marco de la puerta (debajo del panel) como una barrera de condensación.
Las láminas se sostienen con cinta doble faz. Revise sus posiciones y remuévalas. Cámbielas siempre antes de volver a colocar el panel.
Recolocación de la tapa
Selle en posición la barrera de condensación con cinta adhesiva.
Para volver a colocar la tapa, póngala en posición e inserte los tacos golpeando el panel con la palma de la mano.